La capacidad para hacer networking se ha convertido en una habilidad fundamental para impulsar el éxito profesional. Más allá de la simple recopilación de contactos, el verdadero diferenciador reside en las habilidades lingüísticas y comunicativas que desplegamos cuando vamos a este tipo de eventos. ¿La buena noticia? Que se pueden entrenar. Vamos a ver cómo.
¿Qué es el networking?
El networking se refiere a la creación y el desarrollo de una red de contactos profesionales con el objetivo de establecer relaciones mutuamente beneficiosas. En otras palabras, consiste en establecer y cultivar conexiones con personas que comparten intereses, objetivos o industrias similares.
Puede tener lugar tanto de manera presencial como en entornos virtuales, y tiene infinitos beneficios para tu negocio. En este vídeo te explicarán algunos:
¿Cómo hacer networking? 4 habilidades lingüísticas clave
1. Dominar tu expresión
Tal vez buscas establecer contactos internacionales para tu empresa. El primer paso y el más importante es dominar el idioma, lógicamente. Esto implica comprender y expresarse con fluidez, tener un vocabulario adecuado y utilizar la gramática correctamente.
Pero la capacidad para hacer networking no solo se aplica en un segundo idioma. Para establecer conexiones significativas, es esencial que tengas la capacidad de comunicarte de manera efectiva, aunque se trate de tu lengua materna. Esto conlleva transmitir ideas de manera clara, precisa y atractiva, generar confianza en los interlocutores y evitar malentendidos que podrían afectar las relaciones profesionales.
2. Capacidad para hablar en público
Para que tu mensaje sea atractivo, es crucial saber comunicarlo delante de un público. En este contexto, participan muchos condicionantes: la articulación clara, el tono de voz adecuado, el uso de lenguaje positivo y la capacidad de transmitir mensajes de manera convincente.
Además, las habilidades para hablar en público también abarcan la capacidad de hacer preguntas pertinentes y adaptar el estilo de comunicación a diferentes interlocutores.
3. Escucha activa y empatía
El networking exitoso no se trata solo de hablar, sino también de escuchar de manera activa. La escucha activa, como ya comentábamos en otro post, implica prestar atención a los demás, mostrar interés genuino en lo que están diciendo y comprender su perspectiva.
La empatía también es esencial para establecer conexiones sólidas. Al ser empático, puedes comprender las necesidades y deseos de los demás, y mostrar comprensión para establecer, así, una conexión más profunda.
4. Adaptabilidad y flexibilidad lingüística:
En un entorno de networking, es crucial ser adaptable y flexible en términos lingüísticos. No se trata solamente de adaptarse al estilo de comunicación las personas, sino también de comprender los matices culturales en la forma de hablar y de mostrar respeto hacia las normas lingüísticas de cada entorno.
Es más, es posible que esta flexibilidad llegue al punto de tener que hablar varios idiomas. En la mayoría de entornos empresariales y de negocios suele haber personas de otros lugares, por lo que saber hacer networking en inglés o en otros idiomas comunes será un plus que te abrirá puertas.
¡Desarrolla tu capacidad para hacer networking! 3 habilidades comunicativas
1. La importancia del lenguaje corporal
A menudo se subestima el poder de lo que se comunica sin necesidad de palabras. La forma en que te mueves, tus expresiones faciales, tu postura y tu gestualidad transmiten información a tus interlocutores.
Un lenguaje corporal positivo y abierto puede generar confianza y establecer una conexión más sólida. Por otro lado, el lenguaje corporal cerrado o tenso puede dar la impresión de falta de interés o incomodidad. Ser consciente de tu lenguaje corporal y asegurarte de que refleje una actitud abierta, receptiva y segura puede marcar una gran diferencia en tus interacciones de networking.
¿El truco? Además de la posibilidad de trabajar estas habilidades, lo mínimo es hacer un trabajo previo de cara a sentirte a gusto en el evento en el que vayas a hacer networking. Relativiza los miedos, asume que tienes valor profesional y que puedes dar mucho a los demás, por ejemplo, para estar más relajado.
2. Habilidades de presentación
Dejando de lado los aspectos lingüísticos, una presentación efectiva desde una perspectiva comunicativa implica organizar tus ideas de manera coherente a través de apoyos visuales adecuados.
Además, contar con habilidades de manejo del tiempo, control del nerviosismo y capacidad de adaptación a diferentes audiencias te ayudará a destacarte en eventos de networking y a transmitir tus mensajes de manera convincente.
3. Comunicación escrita y digital:
La comunicación escrita no se excluye del networking. La habilidad de redactar correos electrónicos, concisos y efectivos te ayudará a establecer y mantener relaciones profesionales una vez haya terminado el evento, o antes de este. Es importante utilizar un tono adecuado y cuidar la ortografía y la gramática, adaptándote a cada canal.
Además, familiarizarte con las herramientas de comunicación digital, como las redes sociales profesionales, puede ampliar tus oportunidades de networking. Comunicarte de manera efectiva en línea te permitirá conectarte con profesionales de todo el mundo y ampliar tu alcance más allá de las barreras geográficas.
Errores comunes en el networking y cómo evitarlos
Falta de preparación y conocimiento
A un networking hay que ir con la lección sabida. Antes de interactuar con otros profesionales has de saber, al menos, cuál es el valor añadido de tu proyecto, cómo explicarlo en pocas palabras y cuál es el contexto del evento. A quien no se prepara, se le nota, y da la impresión de falta de interés y profesionalismo.
Para evitar este error, investiga sobre las personas y empresas con las que te vas a conectar, mantente actualizado sobre las tendencias de tu industria y reflexiona sobre cómo puedes brindar valor a tus contactos. De hecho, esta es una actividad que no solo servirá a tu networking, sino a toda la comunicación de tu empresa.
Exceso de habla y falta de escucha
Un error frecuente en el networking es hablar demasiado y no dar espacio a los demás para expresarse. De nuevo, esto va a dar la impresión de que no estás interesado en los demás. Para tener interacciones efectivas, es importante equilibrar la comunicación y practicar la escucha activa.
Presta atención a lo que los demás dicen, haz preguntas pertinentes y muestra interés genuino en sus experiencias y perspectivas. Recuerda, la escucha activa te permitirá establecer conexiones más auténticas y comprender las necesidades de tus contactos. Hablamos para mejorar el silencio, ¡no para acabar con él! Y esto pasa por intuir qué quieren saber los demás de nosotros.
No adaptarse al contexto cultural
Si te encuentras en un entorno de networking multicultural, es fundamental ser consciente de las diferencias culturales y adaptarse a ellas. No tener en cuenta las normas y costumbres culturales puede llevar a malentendidos y crear barreras en la comunicación.
Investiga y comprende las prácticas culturales de las personas con las que interactuarás (y las del lugar en el que lo hagas, si no es donde vives habitualmente), como las formas de saludo, los niveles de formalidad y las normas de etiqueta. Demuestra respeto y adaptabilidad para establecer relaciones sólidas y evitar ofender a los demás.
Descuidar las relaciones a largo plazo
El networking no se trata solo de establecer contactos en el momento, sino de cultivar relaciones a largo plazo. Un error común es descuidar las relaciones después de la primera interacción.
Para mantener y fortalecer tus conexiones profesionales, es importante mantener el contacto de forma regular, mostrar interés en las trayectorias y logros de los demás y buscar oportunidades de colaboración o apoyo mutuo. Mantén un seguimiento periódico a través de correos electrónicos, reuniones o participación en eventos relevantes. Invierte tiempo y energía en mantener tus relaciones a largo plazo: pueden serte valiosas en el futuro.
La capacidad para hacer networking es la capacidad para conectarse
A través del networking, entrenar nuestras palabras y gestos puede tejer lazos duraderos con personas afines y abrir puertas hacia oportunidades inimaginables.
Un buen dominio del idioma, una comunicación verbal y escrita que cautive y una escucha empática que trascienda las palabras serán los ingredientes para marcar la diferencia en un mundo cada vez más interconectado. ¡Aprende a comunicarte para conectarte!