Aún sin saber qué son los MOOC, seguro que la palabra te suena. Hace ya algunos años que se está produciendo lo que hay quien no se corta en llamar “una revolución” en el mundo de la formación. Se trata de los MOOC, nombre que proviene de las siglas de Massive Open Online Course, ‘curso masivo abierto en línea.
Aparecen como setas en las webs de universidades, en LinkedIn, en blogs informativos… Y son, realmente, una opción interesante, no podemos negarlo. Eso sí, como todo en esta vida tienen sus luces y sus sombras. Vamos a verlo.
Pero ¿qué son los MOOC realmente?
Puesto en palabras bonitas, un MOOC es un curso interactivo no tutorizado, en línea, que puedes seguir a tu ritmo y que cuenta con recursos para el autoaprendizaje, como vídeos y test. Los cursos MOOC gratuitos suelen componerse de unidades en las que tienes un vídeo principal en el que se explica la materia, contenidos escritos que la amplían y tests de múltiple respuesta que se corrigen automáticamente.
Si lo simplificamos, los MOOC son la evolución de los manuales específicos que llevan existiendo toda la vida (esos que tenían test al final de cada capítulo y las respuestas al final del libro), pero adaptados al formato multimedia. Su formato multimedia, eso sí, los hace más dinámicos, accesibles e interactivos. Pero con ellos aplica la máxima del tú te lo guisas, tú te lo comes.
Lo bueno de los materiales masivos y gratuitos
El gran reclamo de los MOOC es que cualquiera puede participar en uno sin gastarse ni un euro, tan solo necesitará tener conexión a Internet. Además, los recursos que ofrecen son de calidad, ya que, debido a la concepción conectivista de los MOOC, en su creación y planificación participan muchas de las mejores universidades del mundo.
Así a primera vista resultan irresistibles, ¿verdad?
No vamos a negar que lo son. Su variedad temática y su accesibilidad los hacen aptos para todas las personas con ganas de aprender. Como los manuales, o cualquier libro de texto, los MOOC tienen contenido interesante y útil, que nos ayudará a conocer asuntos nuevos o a profundizar en temas de los que ya tenemos conocimiento.
¿Son útiles los MOOC realmente? Los peros
En realidad, separar este formato de una buena formación específica. El carácter masivo de estos cursos mooc gratis elimina cualquier posibilidad de personalización. Los alumnos —que, para ser más precisos deberíamos llamar usuarios— no reciben un material ni disfrutan de una metodología adaptada a sus necesidades. Se trata de un material estándar, invariable.
Por este motivo, muchos encontrarán el contenido del curso imposible de seguir tanto por ser demasiado difícil como por ser demasiado sencillo. Esto repercute negativamente en el aprendizaje. Y, si no tenemos claro que el contenido nos interesa (lo que implica una gran capacidad de metacognición), podemos acabar frustrados.
Asimismo, al ser un curso abierto y con una organización basada en la colaboración, la gran mayoría de ellos no disponen de una certificación oficial, por lo que no tendrán valor en tu currículum. Los que la tienen, además, cobran por ella, y un reclutador no le dará tanto valor como a un curso bien organizado (en los departamentos de recursos humanos saben lo que es una buena formación). Será como poner en el currículum que has leído X manual…
En definitiva, los MOOC no pueden sustituir a la verdadera formación específica y personalizada que aporta a los alumnos justo lo que necesitan saber para poder desarrollar sus habilidades profesionales de la manera más efectiva. Claro que este tipo de formación difícilmente será gratuita (a menos que la bonifiques a través de Fundae), por lo que aquí os damos la siguiente recomendación:
¿Dónde encontrar cursos MOOC?
Hay múltiples plataformas en las que puedes encontrar este tipo de materiales. Con una búsqueda rápida en Internet, encontrarás las más frecuentes, así que aquí te vamos a dar otras ideas para encontrar algunos un poco más escondidos:
- Las ya mencionadas páginas de MOOC, como Coursera, Udemy o eDx.
- Muchas universidades desarrollan sus propios MOOC. Navega en sus páginas web y encontrarás cursos periódicos gratuitos.
- Los colegios y gremios profesionales a veces tienen formaciones de este tipo, gratuitas o a un bajo coste, y estas sí suelen tener certificación.
- Hay empresas privadas de formación que los utilizan como estrategia de venta. Eso sí, haz el curso con sentido crítico y acuérdate de las mentiras más comunes que nos cuentan al vendernos formación.
- En LinkedIn tienes un apartado dedicado a MOOC propios (incluso puedes crear uno propio). Se llama LinkedIn Learning.
Los MOOC: un buen recurso pero no un sustituto de la formación integral
No cabe duda de que los MOOC son un recurso de gran valor para todas aquellas personas que deseen aumentar sus conocimientos a título personal. Saber qué son los MOOC y qué es la formación nos ayuda a poder abrazarlos, pero también a ser críticos con ellos.
Si quieres empezar a interesarte por un tema, o no cuentas con mucho dinero para dedicar a una formación, un MOOC, igual que un antiguo manual, es ideal. Si lo que quieres es una formación total, personalizada y con garantías, entonces confía en expertos en el sector del aprendizaje, que se centren en asuntos específicos como hacemos nosotros con la comunicación corporativa y los idiomas.